Folletines de Autoayuda (o de ayuda al prójimo si se los comparte)
Primera Entrega:
* Breves y prescindibles instrucciones para resolver un problema mental
Si Usted está por leer las siguientes instrucciones, ya podría pensarse con cierto grado de certidumbre que tiene algún tipo de problema mental; de lo contrario no estaría persiguiendo este c jun de sin sentido, y
On to pa bras
La
estaria ocupado en cosas mas atractivas e importantes como comer chocolate tirado en su sillón o jugando a adivinar cuantos gajos tiene su mandarina.
De cualquier manera, y para fingir rigor científico no partiremos de supuestos y estableceremos los límites y condiciones para definir y concluir que nos hallamos frente a un problema mental.
Para iniciar este camino, es muy importante que el lector haya previamente desarrollado en algún grado el conocimiento de sí mismo, su registro personal. Si este no es su caso, no renuncie ni se preocupe, esta misma editorial cuenta con otros títulos que le permitirán ampliar su autoconocimiento, como “Rascarse no es siempre igual; aprenda a distinguir una duda de un piojo” que podrían serle de utilidad.
Ahora si, ya podemos comenzar a distinguir un problema mental de otros inconvenientes. Si al leer este folleto usted se da cuenta que sus hombros están hacia adelante, que su columna toma forma de caparazón y que su cara, especialmente su nariz, apuntan hacia el monitor como una flecha. Entonces usted tiene, claramente, problemas posturales y no mentales. En ese caso no necesita continuar leyendo, consulte a un especialista, compre un producto mágico en Sprayette… o simplemente cambie la computadora de lugar.
Si en la continuidad de la lectura, repentinamente aparece en su pantalla un cartel que la cubre por completo con frases como la siguiente “Terminal Bloqueado” o “Ciber Fox, bienvenido!” Usted entonces, tiene problemas de dinero y puede prescindir de estas instrucciones. Busque un trabajo o un plan estatal, o alguna forma de tener dinero sin trabajar ni recibir ayuda gubernamental (si la encuentra no dude en avisarme).
Si aun continúa leyendo este folleto, y se le dificulta concentrarse en estas palabras, su estomago parece estar centrifugándose y siente esas patadas a la conciencia que los especialistas llaman culpa, no es meritorio de mi parte aclararle que la lectura de las instrucciones es inútil y prescindible, y que Usted tiene resaca y además esta comenzando a recordar lo que hizo anoche (no se desanime amigo lector, también contamos entre nuestras publicaciones con textos para su situación, por ejemplo “Increíbles excusas para justificar ese sms”)
Y ahora que ya despejamos el campo, que solamente quedamos Usted y yo… mírese por un instante… salvo que sea un gato, usted tiene una sola vida así que no sea sonzo ni pierda el tiempo en esto; salga, sonría, camine, llore, tropiece, levántese para volver a tropezarse, ame, disfrute, viva…
Si le va bien, por favor me escribe y me cuenta como hizo.
Agosto 2010